El Viaje
Me fui de mi gigantesca aldea, sin saber a donde iba, ni que me esperaba, muchos de mis amigos pensaban que pronto volvería otros me dijeron que el barrio me quedaba chico, que era un bicho raro, siempre soñando, siempre fuera de lugar. Pero hay algo que me dieron y siempre llevo conmigo: me enseñaron a querer a mi gente y a no olvidarla, porque el pasado es lo único que te metes en la mochila cuando te vas. Me acompañaran siempre las canciones del tocadiscos de mi tío Beto, con su púa mal templada, vaya donde vaya. Dije a todo el mundo que me iba de vacaciones a España, pero inicié el trámite de homologación de mi título de bachillerato, repartí libros entre algunos de mis mejores amigos, a cada uno el que le correspondía, metí en una valija los que más amaba y les dije adiós para siempre a mis pequeños y románticos primeros amores. Mi madre selló mi habitación en un tiempo sin tiempo y le sacó el polvo durante el año en que tuvo que tomar ella la misma decisión. ...